247 Todas las palabras de Dios son la verdad
I
Dios ha venido a vivir con el hombre en la tierra
y expresa muchas verdades.
Ya no busco vagamente pues las palabras de Dios me guían.
Cada día leo Sus palabras y vivo ante Dios; el Espíritu Santo me ilumina.
Entiendo la verdad con más claridad y mi vida avanza cada día.
Las palabras de Dios exponen por completo los hechos de corrupción del hombre
y todos están completamente convencidos.
A través del juicio de las palabras de Dios y de sufrir durante pruebas,
mi carácter corrupto se purifica.
Al disfrutar la riqueza de las palabras de Dios, en verdad he ganado mucho.
Al contemplar la justicia y la santidad del carácter de Dios,
le temo y lo adoro.
Las palabras de Dios son la verdad.
II
Al leer las palabras de Dios, entiendo la verdad,
trasciendo las limitaciones de la carne.
Al buscar la verdad y someterme a Dios mientras cumplo mi deber,
vivo la semejanza de una persona honesta.
Entiendo la verdad y desecho mi carácter corrupto;
la verdad de las palabras de Dios es muy valiosa.
Al practicar las palabras de Dios, gano la verdad y vida
y mi corazón no podría pedir más.
Al ver lo grande y real que es el amor de Dios,
con gusto le entrego mi sincero corazón.
Por duro y tortuoso que sea el camino por delante,
sigo a Dios con fe suprema.
Busco amar a Dios, temerlo y evitar el mal;
la senda a seguir es más brillante que nunca.
Seguiré a Cristo hasta el final y seré leal para recibir la sonriente aparición de Dios.
Las palabras de Dios son la verdad.